Cada 15 de agosto se celebra el Día Mundial de la Relajación, y es que la vida frenética trae consigo el peligro de estresarse, lo que lleva a enfermedades peligrosas para la salud. Entre ellas se destacan la alta presión arterial, los problemas cardíacos, la obesidad y la diabetes.
Por eso es importante recordar que debemos parar de vez en cuando y relajarnos. Todo descanso que le brindemos a nuestro cuerpo nos permite reordenar las funciones biológicas y los procesos de nuestro organismo. Es algo similar a lo que ocurre cuando reiniciamos un dispositivo electrónico.
Nadie sabe realmente cómo y cuándo surgió el Día Mundial de la Relajación, lo cierto es que desde hace algunos años se ha popularizado la celebración, y como cae en el verano del hemisferio norte, lo convierte en un momento ideal para descansar.
Existen diferentes formas de relajarse, entre las más populares están la meditación, el yoga, hacer actividades deportivas e incluso tener un día analógico, que se trata de desconectarse al menos por 24 horas de los dispositivos electrónicos, que generan estrés y evitan que nos relajemos en plenitud.
