La desaparición de Silvia Chávez (72) no deja de ser un misterio. Recordemos que en julio de 2022 fue visto por última vez y hasta ahora se sabe poco y nada, pese al trabajo de los investigadores y de la Justicia. Ahora se conoció que los huesos encontrados en diciembre pasado -en Tulio Angriman al 7000-, no pertenecen a la enfermera jubilada.
Así lo determinó el laboratorio de análisis genéticos de la provincia de Córdoba. Los restos se enviaron allí porque el estado en el que se encontraban no permitieron estudiarlos en Mendoza.
Por estos días llegó al escritorio de la fiscal Paula Arana -especializada en violencia de género y a cargo de la causa- el detalle de las comunicaciones entre los diferentes celulares que secuestraron en los operativos y esperan dar con algún dato trascendente que permita conocer el destino de Chávez.
Un dato más, Mauricio Albornoz y Carina Domínguez -su pareja- están acusados del delito de homicidio agravado por ser cometido con alevosía y por codicia. Él tras las rejas y ella -por un problema de salud- con prisión preventiva domiciliaria.
Se estima que en breve la fiscal elevaría la causa a debate y por la calificación, ambos podrían recibir la pena de prisión perpetua a manos de un juicio por jurado.