El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) publicará hoy a las 16 horas el dato oficial de inflación correspondiente a julio de 2025. Según las proyecciones de consultoras privadas y relevamientos sectoriales, el índice se ubicaría en torno al 2%. El dato llega en un contexto de suba del dólar oficial y con señales de aceleración en algunos rubros, aunque los analistas coinciden en que el traslado a precios de la devaluación aún no se refleja de manera plena.
Inflación en la Ciudad de Buenos Aires: un anticipo del dato nacional
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) de la Ciudad de Buenos Aires, que suele anticipar la tendencia del indicador nacional, mostró en julio un aumento del 2,5%, el más alto desde marzo. El alza fue impulsada principalmente por Restaurantes y hoteles y Transporte.
Con este resultado, la inflación acumulada en la capital alcanzó el 18,1% en lo que va del año, mientras que la variación interanual trepó al 40,9%.
Proyecciones privadas: entre el 1,8% y el 2%
Las estimaciones de las consultoras privadas para la inflación de julio muestran una dispersión acotada, con valores que oscilan entre el 1,8% y el 2%.
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EcoGo proyecta un aumento del 1,8%, levemente por encima del 1,6% de junio. Esto llevaría la inflación acumulada en 2025 al 17,6%, con un dato interanual del 38,3%. Según el relevamiento, los precios estacionales crecieron 3,3% impulsados por el gasto turístico del receso invernal.
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C&T midió un incremento mensual del 1,9% en el Gran Buenos Aires, por debajo del 2% de junio. Con este dato, la inflación interanual bajaría del 38,8% al 35,5%. Entre los factores destacados se encuentra el fuerte aumento en verduras, el mayor desde marzo.
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Equilibra estimó una suba del 1,9%, con precios regulados en alza del 2,4%. En cambio, los precios estacionales crecieron solo 1,6%, aunque recuperaron terreno frente a la caída de 0,2% en junio.
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PxQ calculó una variación de 1,8%, acumulando un 17,1% en el año y un 36,4% en los últimos doce meses. Los principales aumentos se dieron en combustibles, pollo y almuerzos fuera del hogar, mientras que Prendas de vestir y calzado registró una baja de 0,1%. La consultora destacó que, por ahora, no se observan impactos relevantes del tipo de cambio sobre los precios.
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Analytica prevé una inflación del 1,9%, con un incremento marcado en frutas y verduras.

La inflación de los trabajadores también marcó 2%
El Instituto de Estadística de los Trabajadores (IET), junto a la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET) y el Centro para la Concertación y el Desarrollo (CCD), informó que la inflación de los trabajadores subió al 2% en julio, frente al 1,8% de junio.
En lo que va de 2025, este indicador acumula un alza del 16,3%, mientras que la variación interanual alcanza el 36,5%.
Según el IET, los mayores aumentos del mes se registraron en Restaurantes y hoteles (+3,3%), Recreación y Cultura (+3,2%), Transporte (+3%) y Alimentos y bebidas no alcohólicas (+1,9%). En contraste, Prendas de vestir y calzado cayó un 1,4%.
Impacto del dólar y salarios
El director ejecutivo del CCD y exministro de Educación, Nicolás Trotta, advirtió que en julio la inflación de alimentos triplicó la variación de junio, pasando de 0,6% a 1,9%. “Este es apenas el efecto inicial de la devaluación de julio y tendrá repercusiones en agosto”, aseguró. También subrayó que los salarios se encuentran 5,5% por debajo de los niveles de noviembre de 2023.
Por su parte, el coordinador general del IET, Fabián Amico, señaló que el impacto del incremento del dólar en los precios podría ser menor si el Gobierno logra frenar ajustes salariales. Sin embargo, advirtió que, en ese caso, la moderación se explicaría por la caída del salario real y la debilidad del poder adquisitivo de los trabajadores.
Factores estacionales y rubros con mayor incidencia
Los factores estacionales jugaron un rol importante en la inflación de julio, sobre todo por el receso invernal y el aumento del turismo interno. Esto impactó en rubros como gastronomía, hotelería y transporte de media y larga distancia.
A su vez, las consultoras coinciden en que alimentos frescos como frutas y verduras mostraron subas destacadas, lo que contribuyó a elevar el índice general. El caso contrario se dio en indumentaria, que registró bajas moderadas tras las liquidaciones de temporada.

Expectativas para agosto
Los analistas advierten que el dato de agosto podría mostrar una aceleración, principalmente por el traslado a precios del salto del tipo de cambio oficial ocurrido en julio. Aunque el impacto pleno podría verse en septiembre, algunos rubros sensibles como alimentos y combustibles ya estarían ajustando precios.
El desafío para el Gobierno será contener la expectativa inflacionaria en un escenario de menor poder adquisitivo y presión cambiaria.
En síntesis, si bien el dato de julio muestra una inflación moderada en torno al 2%, las señales apuntan a un piso más alto para los próximos meses, con riesgos de aceleración si el dólar sigue en alza y los precios regulados acompañan la tendencia.
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