Anoche, alrededor de las 23:30 horas, el terror se apoderó de una reunión familiar que tenía como escenario una vivienda de calle Independencia al 1545 de Pueblo Diamante.
Según consta en el parte policial, «un descuido» terminó en un momento de extrema angustia y desesperación.
Ocurre que una puerta de la casa quedó abierta y dos pequeños de un año salieron al patio donde se encuentra una piscina. Lo que vino después fue consternación dado que ambos cayeron al agua.
Fueron los propios familiares los que sacaron de la pileta a los niños y rápidamente practicaron maniobras de RCP mientras los trasladaban en auto particular al hospital Teodoro J. Schestakow.
En la guardia del nosocomio local, con la intervención de los profesionales, los chiquitos vomitaron agua.
Cuando fueron estabilizados, se decidió la internación en la Unidad de Terapia Intensiva Pediátrica.
La causa se instruye en la Comisaría Octava como “averiguación lesiones graves”, en tanto que el diagnóstico médico se rotuló como “ahogamiento por inmersión”.
