El Gobierno nacional oficializó este martes la quita de retenciones para la exportación de carnes bovinas y avícolas, medida que regirá hasta el 31 de octubre de 2025. La decisión busca acelerar el ingreso de divisas en un contexto de tensión cambiaria, aunque en Mendoza el anuncio abrió un fuerte debate: mientras desde el sector comercial advierten sobre subas de hasta el 30% en los cortes, el Ministerio de Producción provincial sostiene que no habrá aumentos.
La norma fue publicada en el Boletín Oficial mediante el Decreto 685/2025, con la firma del presidente Javier Milei, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y el ministro de Economía, Luis Caputo. El vocero presidencial, Manuel Adorni, ya había adelantado la medida a través de la red social X, donde remarcó: “Este es el único gobierno que, ante las adversidades, responde bajando impuestos”.
Cómo funcionará la quita de retenciones
El decreto establece una alícuota del 0% para el Derecho de Exportación (D.E.) de carnes bovinas y aviares hasta el 31 de octubre de 2025, inclusive. Sin embargo, el beneficio está condicionado: los exportadores deberán liquidar al menos el 90% de las divisas obtenidas en un plazo máximo de tres días hábiles desde la presentación de la Declaración Jurada de Venta al Exterior (DJVE).
La medida busca reforzar las reservas del Banco Central y acelerar el flujo de dólares al mercado local. En caso de incumplimiento, el exportador perderá el beneficio de retenciones cero y se le aplicará la alícuota previa, además de sanciones legales. También quedará inhabilitado para volver a utilizar este esquema impositivo hasta regularizar su situación.
Esta decisión se suma a la suspensión de los derechos de exportación de granos, también anunciada esta semana, como parte de la estrategia oficial para estimular al campo y generar ingreso de divisas.
Antecedentes en la política de retenciones
Hasta antes de este anuncio, las retenciones a la carne bovina se habían reducido del 6,75% al 5% como parte de un recorte más amplio sobre los derechos de exportación de distintos productos agropecuarios. La eliminación total de este tributo representa un giro más radical en la política fiscal del Ejecutivo, que insiste en que bajar impuestos es la vía para reactivar la producción.
El debate en Mendoza: ¿suba de precios o estabilidad?
La medida generó posiciones encontradas en Mendoza, una de las provincias donde el consumo interno de carne es fuerte. José Rizzo, presidente de la Cámara de Abastecedores de Carne de la provincia, anticipó que la eliminación de las retenciones impactará directamente en el mercado local.
“La carne se maneja por oferta y demanda. Al eliminar la retención del 7%, el exportador podrá pagar más por el producto. Eso se trasladará al consumo interno. Estimamos un incremento entre el 20% y el 30% en los cortes”, explicó en diálogo con medios locales.
Rizzo advirtió también que el poder adquisitivo de la población es limitado y que cualquier aumento afectará a un sector ya “golpeado”. Según el empresario, los efectos podrían verse en el corto plazo, una vez que cierre el mercado de referencia para la carne bovina y aviar.
La posición del Gobierno de Mendoza
El ministro de Producción de Mendoza, Rodolfo Vargas Arizu, ofreció una visión contraria. Para él, la quita de retenciones no generará aumentos en los precios minoristas, sino que contribuirá a estabilizar la economía.
“Todos los productos de la provincia ya estaban exentos de retenciones. Esta baja de impuestos es positiva y ayuda a estabilizar el país. No creo que suban los precios de la carne, al contrario: con un tipo de cambio más estable, no habrá aumentos”, sostuvo el funcionario.
Vargas Arizu también destacó la reacción positiva de los mercados tras los anuncios: “Ya bajó el riesgo país en 300 puntos y se estabilizó el dólar. Nadie se va a arriesgar a subir precios en una economía desinflada como la actual”.
Un escenario de incertidumbre
Aunque el Gobierno nacional defiende la medida como un estímulo para las exportaciones y una forma de captar dólares, en Mendoza persiste la incertidumbre sobre su impacto real en el consumo interno.
Por un lado, los comerciantes alertan que la competencia de los exportadores podría presionar los precios hacia arriba. Por otro, las autoridades provinciales consideran que la baja de impuestos contribuirá a la estabilidad y que los aumentos no se concretarán.
Mientras tanto, la carne se consolida como uno de los principales ejes de discusión económica y social en la provincia. El cierre de mercados y la evolución del dólar serán los factores determinantes en las próximas semanas para confirmar cuál de las dos posturas se impone.
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https://www.boletinoficial.gob.ar/detalleAviso/primera/331786/20250923
