No es una novedad que la salud en Mendoza es un tema verdaderamente preocupante. Es que a mil vueltas con los precios de las consultas y copagos, y a la histórica situación de la Obra Social de los Empleados Públicos (OSEP) que cada vez es más compleja, se sumó el reclamo casi generalizado de sus profesionales porque -explicaron- los bajos sueldos y las malas condiciones de trabajo, empujaron al sector a una crisis que no tiene precedentes.
Ahora, teniendo como fin que “el salario de quienes cuidan la salud de la población recupere el poder adquisitivo”, la Asociación Mendocina de Profesionales de la Salud (AMProS) le exigió al Gobierno de Mendoza que convoque a paritarias de manera urgente.
La conducción del sindicato fue contundente en sus argumentos: “si los salarios no se adecúan a la realidad continuará el masivo éxodo de talentos formados en nuestra provincia y así la atención seguirá empeorando en los efectores públicos de salud”.
Además en el documento con el que AMProS pidió la reapertura de la Comisión Negociadora Salarial de manera urgente, aseguró: “no podemos dejar de advertir que la negativa sistemática del Poder Ejecutivo a reconocer cláusulas que generen sostenimiento del poder adquisitivo del salario en forma automática, obliga al gremio que defiende los derechos de los profesionales de la salud de Mendoza a requerir la urgente apertura de la presente comisión negociadora, con el afán de evitar la pérdida del salario de los profesionales, arribando a acuerdos que permitan recomponer los sueldos, no solo por el congelamiento producido en el año 2020 sino por la inflación descontrolada y el estrepitoso aumento de precios que afecta al país”.