14 de junio de 2025
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«En el INTA no sobra nadie»: preocupación y resistencia ante los recortes

Por Verónica Iglesias

13 de mayo de 2025
Continúan los recortes en el INTA
En el INTA de Rama Caída, el recorte ya se siente

El proceso de ajuste estatal golpea con fuerza a numerosas instituciones que son clave del desarrollo nacional y el INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria) es uno de ellos, que atraviesa uno de los momentos más delicados de sus casi 70 años de historia. La reestructuración impulsada por el gobierno nacional ya está en marcha, reflejada en la pérdida de cientos de puestos de trabajo y adelantando un escenario todavía más desolador: el cierre de agencias de extensión y la posible desvinculación de 1.500 trabajadores más. Todo esto se da en un organismo que ya está operando con menos personal del necesario.

Andrés Quiroga -técnico extensionista del INTA de Rama Caída y secretario de la Asociación del Personal del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Apinta)- dejó en claro porqué «en el INTA no sobra nadie».

Para tener en cuenta y entender la situación: un estudio realizado en 2019 por una universidad de Buenos Aires, indicaba que el INTA  precisaba al menos 7.200 técnicos para cumplir eficazmente su función territorial. Actualmente -con 6.100 trabajadores a nivel nacional- el Estado planea recortar aún más la cantidad de personal donde ya falta personal. Es decir que si se concreta el despido de 1.500 agentes, apenas quedarán 4.600 trabajadores para cubrir 49 estaciones experimentales y más de 300 agencias en todo el país.

Un trabajo silencioso, pero fundamental

«El INTA es una institución con historia. Acompaña al productor agropecuario y agroindustrial desde hace casi 70 años. Hoy, lamentablemente, somos parte del foco de la reestructuración del Estado Nacional», comenzó diciendo Quiroga.

Desde noviembre del año pasado, el organismo se encuentra en estado de alerta. En una primera etapa, se ofrecieron retiros voluntarios y ya se fueron más de 250 trabajadores en todo el país. En Rama Caída, eso se tradujo en la salida de dos profesionales.

«Ya arrancamos con recortes sutiles. Y ahora van por más. Quieren achicar todavía más el personal. Lo grave es que ya somos pocos», agregó.

El número que preocupa

Según explicó Quiroga, actualmente el INTA cuenta con 6.100 trabajadores a nivel nacional, distribuidos en 49 estaciones experimentales y más de 300 agencias de extensión. Sin embargo, un estudio realizado en 2019 por una universidad de Buenos Aires estimó que se necesitaban al menos 7.200 personas para cubrir correctamente el territorio y dar respuesta a las demandas.

«Es decir, ya nos faltaban 1.100 personas… ¡Y ahora quieren recortar 1.500 más! Eso significa que al INTA le van a faltar 2.500 técnicos«, remarcó con preocupación.

Rama Caída: poco personal y mucha tarea

En la estación experimental de Rama Caída, actualmente trabajan 58 personas para cubrir los tres departamentos del sur de Mendoza: San Rafael, General Alvear y Malargüe.

«Es un número muy chico para semejante extensión. Abarcamos el 52% de la provincia y encima tenemos profesionales que se jubilan este año. No se cubren las vacantes. Lo que estamos pidiendo es simple: que no se sigan achicando los equipos», sostuvo.

Y enfatizó: “En el INTA no sobra nadie”, el eslogan que repiten desde APINTA en medio de esta etapa de resistencia.

¿Qué hace el INTA todos los días?

Muchos conocen el nombre del INTA, pero no todos saben exactamente qué hace. Quiroga explicó que el trabajo está dividido según las necesidades de cada región. En Rama Caída, por ejemplo, abordan una amplia variedad de temas: desde viticultura, horticultura y fruticultura, hasta sanidad vegetal, agroecología, ganadería bajo riego y producción en zonas de secano.

«Estamos todos los días con el productor. Nos consultan por teléfono, redes sociales o vienen personalmente. Vamos a sus fincas, les damos asesoramiento técnico gratuito», detalló.

También resaltó que cuentan con laboratorios de suelo, sanidad vegetal y alimentos. Incluso tienen un centro de multiplicación de aves, que antes entregaba pollitos a familias vulnerables con apoyo del Ministerio de Desarrollo Social. “Hoy, como se cortaron los fondos, ese programa se sostiene con recursos de la cooperadora”, explicó.

 

¿Cómo entra alguien a trabajar en el INTA?

Uno de los cuestionamientos más frecuentes que reciben desde sectores críticos es que «todos entraron por acomodo». Quiroga fue claro: «En el INTA todos los ingresos son por concurso. Desde el director nacional hasta el último técnico».

Además, destacó que hay procesos transparentes, con llamados públicos, actas, participación gremial y evaluación por méritos. “Yo ya cumplí 30 años en la institución. Nos duele que digan que entramos por política, pero también sabemos que muchas veces se habla desde el desconocimiento”, comentó.

Silencio desde el gobierno de Mendoza

Consultado sobre el respaldo que reciben desde el Gobierno Provincial, Quiroga fue cauto: «Yo en particular no he escuchado al gobernador salir a defender al INTA. Hay reuniones, hay contactos, pero no hemos sentido un respaldo fuerte en este momento».

Y aclaró que el INTA está regulado por consejos regionales y nacionales en los que participan representantes del gobierno, universidades y entidades del sector productivo. “Les hemos llevado nuestra preocupación. Hoy no estamos discutiendo salarios, estamos peleando por mantener los puestos de trabajo”, dijo.

¿Y ahora qué?

Ya se aprobó una nueva resolución (la 131/25), que implica más achiques dentro de la estructura del INTA. Se eliminaron plataformas de innovación tecnológica y varios cargos.

«Nosotros desde APINTA no nos oponemos a revisar estructuras, a organizarnos mejor. Lo que pedimos es que no se recorte más personal. Porque la tarea no disminuye: la demanda del productor sigue siendo la misma», afirmó.

También señaló que están trabajando junto a abogados en la presentación de recursos y amparos, y que seguirán visibilizando la situación en cada instancia posible.

Una advertencia a la sociedad

«Muchos de los que visitan el INTA con las escuelas, después votan gestiones que nos perjudican. Parece obvio lo que venimos a contar, pero es necesario decirlo. No somos millonarios. No estamos acomodados. Somos profesionales que ingresamos por concurso y trabajamos todos los días en contacto con las economías regionales. ¿Qué más tenemos que demostrar?», cerró Quiroga.

Más información sobre el INTA

https://www.apinta.org/

https://lv18.com.ar/el-municipio-aporta-plantines-para-impulsar-la-produccion-horticola/

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